Dada la preocupación por el futuro de la comarca, seis ayuntamientos de El Bierzo se han unido para manifestar su rechazo a la instalación de macroparques eólicos y fotovoltaicos en ella. La manifestación, programada para el 22 de octubre en Ponferrada, es un reflejo del creciente descontento ciudadano ante proyectos que, lejos de beneficiar a la comunidad, amenazan con alterar el equilibrio del entorno y el desarrollo sostenible de la región.
Este movimiento, impulsado por la Fundación Prada a Tope, ha logrado el respaldo de 55 asociaciones y continúa trabajando para sumar más voces a su causa. La preocupación radica en los perjuicios que estos proyectos podrían traer a la comarca en el medio y largo plazo, afectando no solo el paisaje y el turismo, sino también el sector agroalimentario y económico.
El presidente del Consejo Comarcal, Olegario Ramón, ha expresado su compromiso de llevar este asunto al próximo pleno de la institución, evidenciando así la relevancia de esta protesta ciudadana en Ponferrada contra los macroparques eólicos. Los ayuntamientos de Arganza, Camponaraya, Cacabelos, Carracedelo, Corullón y Trabadelo han mostrado su apoyo unánime, aprobando en pleno el manifiesto y sumándose a la convocatoria.
El Consejo Regulador de la DO Bierzo ha hecho eco de este llamado, instando a todas las bodegas asociadas a tomar conciencia de la situación y unirse a la protesta. La manifestación busca ser un faro de sensibilización y reflexión sobre la necesidad de una transición energética justa y equitativa, que no se rija por el lucro económico de grandes corporaciones y fondos de inversión, sino por principios de ahorro, eficiencia y autoconsumo.
En este contexto, la manifestación del 22 de octubre se presenta como un momento crucial para el futuro de El Bierzo, un espacio donde la ciudadanía puede expresar su deseo de proteger su tierra y su calidad de vida frente a intereses económicos que no consideran el bienestar común ni el respeto por el medio ambiente.