El 30 de diciembre marca un hito en la movilidad de la región de El Bierzo, con la reapertura del viaducto de O Castro en la autovía A-6 en dirección a Madrid. Esta fecha, anunciada por José Ramón Gómez Besteiro, presidente de la Comisión de Transportes en el Congreso y candidato del PSOE a la Xunta de Galicia, representa el fin de un periodo de intensas obras y una inversión estatal de 70 millones de euros.
La reconstrucción de este viaducto, que sufrió el derrumbe de dos de sus vanos en junio del año pasado, ha sido una tarea ardua. El esfuerzo se ha centrado en garantizar la seguridad y la eficiencia de la infraestructura, con la instalación de sistemas de contención avanzados y la realización de pruebas de carga exhaustivas.
La apertura del viaducto en dirección a Madrid es un alivio significativo para el tráfico en la zona, especialmente en Pedrafita do Cebreiro. Hasta ahora, la circulación se ha desviado por la N-VI, atravesando el casco urbano de esta localidad, lo que ha generado congestión y retrasos. Con la nueva disposición, se espera una mejora notable en el flujo vehicular, facilitando el tránsito tanto para residentes como para viajeros.
Sin embargo, la situación en dirección a Galicia sigue pendiente de una solución definitiva. El tráfico hacia esta región continuará desviándose por la N-VI hasta la conclusión del otro viaducto, cuya apertura está programada para el verano de 2024. Este proyecto paralelo, también ejecutado con rigurosidad y una inversión considerable, busca replicar el éxito y la eficiencia observados en el viaducto en dirección a Madrid.
La coordinación y el compromiso del Gobierno de Pedro Sánchez han sido clave en el cumplimiento de los plazos y en la gestión eficaz de los recursos. La colaboración entre diferentes niveles de gobierno y la participación activa de autoridades locales, como el presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, y los alcaldes de Pedrafita y Vega de Valcarce, han sido fundamentales para el avance de estas obras.
