Teleperformance, la multinacional de call centers en Ponferrada, ha decidido ofrecer a sus empleados la opción de adherirse voluntariamente al Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Este movimiento se produce tras intensas negociaciones y encuentros entre la dirección de la empresa y los representantes sindicales. UGT ve en esta medida una forma de suavizar el impacto del ERE, aunque no todos los sindicatos comparten esta visión.
En el epicentro de las conversaciones, se encuentra la posibilidad de que los trabajadores de distintos centros, como Ponferrada, Sevilla, Madrid y A Coruña, opten por una salida voluntaria. Aquellos que elijan esta vía recibirán 30 días de salario por año trabajado, con un tope de 18 mensualidades. Sin embargo, CGT, sindicato mayoritario en Ponferrada, rechaza la propuesta y aboga por buscar alternativas y futuros para todos los centros de trabajo.
No obstante, la oferta de Teleperformance no está exenta de condiciones y restricciones. Los trabajadores mayores de 50 años y aquellos vinculados a campañas específicas como OpenBank, Miravía, Astara e Iberdrola, quedan excluidos de la opción voluntaria. Además, se establece un límite de adscripciones voluntarias en el turno de tarde de hasta 84 trabajadores. La empresa se reserva el derecho de rechazar hasta un 20% de las solicitudes voluntarias, basándose en criterios organizativos y productivos.
Este ERE ha generado un clima de tensión y descontento entre los empleados y los sindicatos, que ven en él una falta de justificación y una amenaza para la calidad y estabilidad laboral. CGT insiste en la necesidad de encontrar nuevas campañas y servicios donde reubicar a los trabajadores y mejorar las condiciones laborales.