La plataforma Bierzo Ya ha intensificado sus esfuerzos para preservar las icónicas torres de la central térmica de Compostilla II en Cubillos del Sil. Esta vez, han recurrido a la vía penal, presentando una denuncia basada en el artículo 773.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Esta acción legal busca proteger a aquellos que se sienten «perjudicados y ofendidos» por una causa específica.
Desde el inicio, el derribo de las torres de Compostilla II ha sido un tema polémico. La plataforma, representada por su portavoz Antonio López Bouza, ha expresado su descontento con el proyecto técnico elaborado por la Junta de Castilla y León. Según Bouza, este proyecto fue realizado en un «tiempo récord» de dos semanas y no refleja la realidad de la situación. Además, cuestiona la veracidad de las cifras presentadas en el informe técnico sobre el mantenimiento de las torres, que ascienden a más de 11 millones de euros. Bouza argumenta que Endesa no ha invertido esa cantidad en las torres durante sus 50 años de existencia.
La plataforma también ha señalado discrepancias entre el informe técnico y las declaraciones del consejero de Cultura, Gonzalo Santonja. Mientras que el consejero afirmó que la recuperación de las torres es irreversible debido a los trabajos ya realizados, el informe sugiere cifras para su reconstrucción. Esto plantea la pregunta: ¿quién está diciendo la verdad?
El futuro de las torres y chimeneas de Compostilla II pende de un hilo, ya que su demolición está programada para el 31 de agosto. La plataforma espera que el juzgado se pronuncie antes de esa fecha. Si las torres son derribadas sin una respuesta clara, podría surgir un «problema judicial», advierte Bouza.
La última bala de Bierzo Ya en este asunto es crucial. La plataforma espera que su denuncia sea admitida y que se realice una investigación exhaustiva sobre el proyecto técnico. Solo el tiempo dirá si sus esfuerzos darán fruto y las torres de Compostilla II se mantendrán en pie como testigos del pasado industrial de la región.
