Una vez más, la Junta de Castilla y León promete grandes cambios con la extensión hasta 2027 del Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros. Aunque se presenta como una alianza con el Fondo de Transición Justa, muchos se preguntan si esta es otra promesa vacía. Se habla de movilizar 281 millones de euros en León y Palencia, pero, considerando el historial, ¿se invertirán eficazmente?
El consejero de Economía, Carlos Fernández Carriedo, lideró una reunión telemática, pintando un panorama optimista. Sin embargo, los habitantes de las zonas afectadas han escuchado estas promesas antes. A pesar de los 197 millones de euros provenientes del Programa Transición Justa España 2021-2027, la desconfianza persiste.
El plan promete diversificar la economía de las zonas mineras y fomentar actividades económicas en otros sectores. Pero, después de años de promesas incumplidas, ¿puede la Junta realmente ofrecer algo diferente esta vez? Las palabras suenan bien: emprendimiento, formación, protección social. Sin embargo, las acciones pasadas sugieren cautela.
Mario Rivas, presidente de ACOM, ha expresado su satisfacción por la prórroga, pero muchos se preguntan si es simplemente otro juego político. Las medidas anteriores, como la bonificación del suelo industrial y los Planes de Empleo Municipal, han tenido un impacto limitado.
Desde 2016, la Junta ha movilizado 439 millones de euros con resultados cuestionables. Los fondos, aunque abundantes en papel, no han logrado revitalizar las comarcas mineras de la manera prometida.