La desaparición de Alberto de Caso Garrido, de 73 años, en Rimor, ha llevado a las autoridades a intensificar la búsqueda dos meses después de su última aparición. La Policía Nacional, en colaboración con los bomberos de Ponferrada, ha implementado el uso de drones y lanchas zodiac para rastrear áreas de difícil acceso en un intento por encontrar alguna pista sobre su paradero.
Desde el día en que Garrido fue reportado como desaparecido, un amplio dispositivo de búsqueda fue activado, involucrando a fuerzas y cuerpos de seguridad, bomberos, Protección Civil y voluntarios. A pesar de los esfuerzos iniciales, las pistas sobre su ubicación han sido escasas.
La operación de búsqueda se ha reforzado con tecnología avanzada, incluyendo drones equipados con cámaras térmicas de alta definición, lo que permite una inspección detallada de áreas previamente inaccesibles. Además, se han desplegado medios acuáticos para examinar el río y sus alrededores, con la esperanza de encontrar cualquier indicio que pueda llevar a Garrido.
La Policía Local de Ponferrada también se ha unido a las labores de búsqueda, examinando cualquier rastro que pueda sugerir la ubicación de Garrido, quien se presume pudo haberse desorientado durante un paseo.