Sigue la agitación electoral en Ponferrada. Esta vez protagonizada por IU que se aleja del proyecto de Podemos y plantea su propia candidatura en forma de «plataforma».
La decisión llama especialmente la atención cuando todas las encuestas otorgan a podemos una altísima probabilidad de repetir en el gobierno municipal y ser la fuerza determinante para volver a revalidar un gobierno progresista en la ciudad.
Los sondeos incluso dan la posibilidad de que un pacto con podemos sea suficiente para garantizar al PSOE que sube en concejales y votos un gobierno de coalición con mayoría absoluta. Un bipartito con un Podemos en alza que pasaría de 2 a 3 concejales.
Atendiendo a esta realidad, es extraño, que Izquierda Unida de Ponferrada haya decidido desmarcarse nuevamente de Podemos y abandonar el camino que en el panorama nacional está liderando Yolanda Díaz y su espacio «Sumar». Esta decisión, a todas luces, supone dificultar la repetición del gobierno progresista y que las fuerzas de izquierdas sigan necesitando un acuerdo con Coalición por El Bierzo para evitar un gobierno del PP y Vox en la capital berciana.
Las declaraciones de Javier Arias (candidato de izquierda Unida) no dejaban lugar a dudas: «Sí que es verdad que Podemos ofrecía unas cosas y nosotros, izquierda Unida, ofrecíamos otra serie de cuestiones y nosotros entendemos que Podemos Ponferrada no aceptó ninguna de las cuestiones que planteábamos por lo tanto no hemos llegado a ese acuerdo».
Fuentes de este medio revelan que 3 han sido las exigencias planteadas por IU para llegar a un acuerdo con Podemos. En primer lugar, IU pretendía obligar a Podemos a abandonar sus siglas y diluir su marca. La palabra «Podemos» no podía aparecer en el nombre de la coalición electoral. En segundo lugar, IU exigía garantizarse el segundo puesto en la lista apartando, para ello, a la actual concejala de Podemos María Luisa Varela o, en su caso, obligarla a dimitir pasadas las elecciones para que Javier Arias fuese concejal. Por último, IU exigía controlar el 50% de los futuros recursos del grupo municipal. Estas exigencias han generado tensiones dentro de la propia IU dado que buena parte de su militancia apostaba por respetar a las dos concejalas electas de Podemos y respetar el nombre que propone el actual acuerdo autonómico y concurrir a las elecciones como «Podemos-IU».
Actuales militantes de IU han transmitido a este medio su malestar por el hecho de que «asegurar el sillón de Javier Arias y la pretensión por parte de nuestra ejecutiva de invisibilizar a Podemos se hayan antepuesto a los intereses de la izquierda en Ponferrada». Ante la ruptura de IU del acueducto, han manifestado que no descartan causar baja en IU.
De este modo, la desesperación de IU por obtener una representación que no le dan las urnas -en las últimas elecciones se quedaron sin representación municipal en el Ayuntamiento de Ponferrada- se han antepuesto al acuerdo.
Por otro lado Podemos y el PSOE están enfocando ya su campaña en vistas al proceso electoral de mayo. Podemos continúa tejiendo alianzas con otras formaciones políticas y movimientos sociales del municipio. Se prevé que próximamente presenten su candidatura de forma pública mientras el PSOE está reforzando el mensaje de «gobierno útil» para Ponferrada.
Veremos que ocurre de aquí a mayo.